Crónica escrita por nuestra compañera Rigel Cedeño.
La ruta como las anteriores fue sencilla y una oportunidad para tener un dÃa activo pero relajado, siete miembros de la SEM iniciamos la ruta en el parking del museo Ecomuseo Lagar de Torrijos, envuelto por el denso pinar que caracteriza a los Montes de Málaga y dando comienzo a unos de los senderos más atractivos del parque natural.Â
Bajamos en dirección a zonas de picnic y camping, siguiendo la ruta entre los árboles que ya se hacÃa bastante agradable por su frescor y la presencia de  muchas flores silvestres. HabÃa algunos árboles caÃdos que necesitaron gran esfuerzo para continuar la ruta. Rápidamente nos incorporamos al camino de tierra que es absolutamente llano y fácil y nos permitió disfrutar de un paseo por zonas menos transitadas y tranquilas, fue una ruta agradable y fresca a un ritmo tranquilo y sin prisas. La ruta no tenÃa una elevación muy marcada asà que se hicieron sin siquiera notarlas. Pasamos cerca de varias ruinas de lagares. Los lagares solÃan ser edificios donde se encuentra un la prensa y el espacio que esta ocupa, donde se pisaban los frutos de la vid, el olivo o el manzano.​​Â
Continuamos la ruta en dirección a un monolito indicador, donde hicimos una pequeña parada para la foto de costumbre y continuamos con dirección a Pocopan, continuamos disfrutando de las hermosas vistas y el camino. Al llegar al monolito de las contadoras se hizo más frecuente la presencia de corredores, senderistas que empezaban la ruta y algunos ciclistas. Hicimos una pausa en el monolito de unos pocos minutos, para luego continuar los últimos 5 kilómetros en dirección al ecomuseo, al llegar lo encontramos abierto y lo visitamos antes de culminar la ruta de un total de 14 ,37 km
En el ecomuseo nos comentaron que la comarca de los Montes de Málaga fue muy afamada en el pasado por la elaboración de sus magnÃficos vinos dulces, semidulces y secos.
